Para Esther García la Solidaridad es un concepto tan grande como sus muchas facetas. Tan grande como las personas que “la practican».  Ella es trabajadora social del Centro Santa María de la Paz de Madrid, donde acogen a personas que presentan una situación de desarraigo social con la necesidad de alojamiento estable y alimentos.

¿Quién es Esther García y cual es su labor en el centro Santa María de la Paz?

Soy Trabajadora Social en este Centro de Acogida desde hace ya 12 años. En todo este tiempo Santa María de la Paz ha evolucionado mucho y con el albergue, hemos crecido también los trabajadores que aquí colaboramos. Mi tarea se focaliza en el área de la Solidaridad y la Obra Social.

Cómo Trabajadora Social, ¿Cómo es tu día a día?

Sin olvidar las tareas de despachos, mis días son todos muy diferentes, ¡no hay dos días iguales! Y aunque puede resultar a veces imprevisible, en el fondo es genial. La Solidaridad es un concepto tan grande como sus muchas facetas. Tan grande como las personas que “la practican”. Algunos días recibimos a gente joven (alumnos de colegios, institutos, universidades, parroquias…) que revolucionan esta casa. Sorprendidos y expectantes al inicio de su visita y emocionados y reflexivos cuando se van después de conocer esta realidad social. Es emocionante, ver sus miradas cuando escuchan a los residentes compartir con ellos su experiencia de vida. Se llevan aprendida una lección para siempre. También asoman por aquí trabajadores de diferentes empresas que vienen cargados de entusiasmo a realizar voluntariado corporativo.

Otras veces son vecinos curiosos que, con la excusa de asomarse a ver los huertos urbanos, confirman que los señores que los cuidan o viven en esta casa no son distintos a ellos, solo necesitan el apoyo que entre todos les ofrecemos en Santa María de la Paz.

En algún momento también aparecen los que con tanto cariño llamamos “antiguos alumnos”, y son los residentes que ya no viven aquí y nos echan de menos, sus visitas nos llenan de alegría.

Y como no, las visitas de los Bienhechores, que siempre pendiente de lo que podamos necesitar, vienen a ver cómo nos va.

"Para trabajar con personas, y ser bueno en ello, hay que sentirlo desde dentro. Requiere emoción y empatía" 1

¿Podrías contarnos alguna anécdota que te haya marcado personal o profesionalmente en tu experiencia?

Podría contarte muchas, quizás las que más me sorprenden son esos múltiples momentos en los que se producen encuentros fortuitos entre residentes y alguien que visita el Centro. Me reafirma en el pensamiento de que unos y otros estamos más cerca de lo que pensamos. Más que anécdotas te contaría aprendizajes, y eso daría para escribir muchos libros.

Si recibieras la visita de una persona interesada en dedicarse al trabajo social e introducirse en este mundo ¿Qué consejos le daría Esther?

En alguna ocasión, los alumnos que nos visitan  me preguntan cómo es esta profesión. Yo les animo a que sea cual sea su elección, actúen de acuerdo a su vocación. Nadie será bueno en su trabajo sino lo sienten desde dentro. Trabajar para personas requiere emoción y empatía, es un privilegio.

El centro Santa María de la Paz ha participado como equipo organizador de la Magic Line SJD Madrid, caminata solidaria que tiene lugar todos los años y que tiene como objetivo recaudar fondos para los proyectos sociales que trabajan los centros de San Juan de Dios de Madrid.

La Magic Line Madrid ofrece la posibilidad de visibilizar lo importante que es la solidaridad. Y además plantea una colaboración inclusiva, todos tenemos nuestro espacio, juntos, independientemente de nuestra circunstancia individual. Todos sumamos y construimos un mundo mejor en el que no es necesario competir, preferimos caminar cerca de quien necesita la red solidaria que teje la Magic Line.

Este año han participado más de 600 personas y la recaudación ha sido muy positiva. En breve sabremos los proyectos sociales que vamos a apoyar.

"Para trabajar con personas, y ser bueno en ello, hay que sentirlo desde dentro. Requiere emoción y empatía" 2

La Obra Social San Juan de Dios apoya a miles de personas vulnerables dentro y fuera de nuestras fronteras. Entre otras acciones, apoya cuidando a los enfermos en sus momentos más difíciles, ofreciendo alimentos a familias necesitadas y protegiendo y acompañando a mayores, personas sin hogar, personas con discapacidad, personas con adicciones y personas con problemas de salud mental en nuestros centros.

Son muchas las personas que nos necesitan y gracias a las aportaciones de personas como tú podemos estar a su lado. Ahora más que nunca, Hospitalidad. Tu apoyo ahora es más necesario que nunca.